Esta mañana ha habido una concentración en el centro de San Juan de Sevilla para mostrar el apoyo a los compañeros a los que se les ha abierto expedientes sancionadores sin que esta dirección haya abierto una investigación de lo ocurrido en las campanadas (o al menos a esta sección no nos consta) y por supuesto, para exigir depurar responsabilidades porque, si bien es cierto que todos somos responsables en nuestro trabajo, no todos tenemos el mismo grado de responsabilidad.
Desde CGT apuntamos como máximo responsable a la dirección técnica, a esos directivos que son los que diseñan y compran o contratar los sistemas que luego resultan a todas luces inoperantes. ¿Donde están esos responsables de la técnica que no dan la cara? ¿Cuántos millones ha costado este sistema de continuidad? Ahora solo les preocupa "redecorar" continuidad ya que a lo mejor vienen de visita los diputados y han quitado un equipo que se compró y nunca utilizó, quizás para que no se vea cómo se tira el dinero público o, lo que es peor, quizás están eliminando pruebas para los expedientes.
Esta dirección que ha engañado a la ciudadanía no nos engaña a nosotros facilitando la salida a un directivo de emisiones que ya tenía 67 años (2 años por encima de su edad de jubilación) y expedientando a trabajadores sin ton ni son como meros cabezas de turco en lugar de depurar responsabilidades de una manera seria; esta actitud demuestra la hipocresía y falta de escrúpulos de esta dirección.
El error en las campanadas, y toda la retahíla de vídeos domésticos, además de la creación de un nuevo género, la videodisculpa institucional, ha dejado atrás un elemento esencial en cómo se ha gestionado desde la Dirección RTVA esta "crisis".
El Director de Estrategia y Comunicación de RTVA, Antonio Ramírez, dio primero a la cadena SER la versión institucional de lo sucedido con las campanadas. Fue después, pasadas las doce del mediodía del día 1, y ante la insistencia de los redactores de guardia en CSR, cuando este directivo habló para la Radio Pública de Andalucía.
Estamos acostumbrados al coqueteo de muchos miembros del gobierno andaluz y de gobiernos municipales con la Cadena SER. Pero lo que no nos podíamos imaginar es que directivos de nuestra propia empresa diesen versiones institucionales a la cadena SER antes que a CSR.
Mal vamos cuando se prima lo privado ante lo público, desde lo público.
CGT quiere denunciar el problema, este fallo ha sido gordo, gordísimo, lo ha visto todo dios, hemos salido en todas partes, muchos hemos dicho tierra trágame cuando nos han pedido explicaciones y ha supuesto no solo un descrédito sino una pérdida de dinero. Por eso los ciudadanos necesitan una explicación coherente y que se nos garantice que los que gestionan esta empresa con dinero público asuman sus responsabilidades. |
