El pasado día 9 de octubre fuimos requeridos por la Inspección de Trabajo para un seguimiento rutinario sobre la implantación del Plan de Igualdad en la RTVA. La empresa llevó “sus papeles” con muchos datos, pero pocas explicaciones. Al menos eso le advirtió la inspectora. La empresa está haciendo la diagnosis, pero igual de importante que la relación de datos son las explicaciones en caso de que exista desproporción entre ambos sexos.
Debemos saber que para el próximo Convenio Colectivo será obligatorio disponer de un Plan de Igualdad como marca la Ley. Por lo tanto, la inspectora le ha requerido a la empresa que nos dé todos esos datos de la diagnosis antes de la negociación del siguiente Convenio.
Cuando parecía que la reunión llegaba a su fin, la representante de CGT-RTVA advirtió a la inspectora de trabajo de la situación de algunas trabajadoras que han denunciado situaciones de acoso ante la inspección, y que después de años siguen esperando a que la empresa, escudada precisamente en la falta de un protocolo, actúe. La reunión dejó de ser rutinaria –al menos eso reflejaba la cara del Jefe de Personal-. La inspectora después de preguntarle a la empresa si efectivamente no contaban con un protocolo de acoso, le informó que la ley obliga a tener uno. Pidió el libro de visita a la empresa y requirió formalmente por escrito un Protocolo de Acoso para el día 30 de octubre.
Ese mismo día, hubo Comité Intercentros de Salud Laboral y CGT-RTVA solicitó que tuviéramos una reunión antes de la fecha indicada por la Inspección de Trabajo para consensuar una propuesta. El Jefe del Servicio de Prevención, Antonio Miño dijo que no le daba tiempo en dos semanas a tener una propuesta de protocolo. Parece que alguien no ha hecho los “deberes” durante todos estos años que trabajadoras de esta casa han denunciado casos de presunto acoso –algunos incluso en los juzgados de lo penal-. Ahora no hay tiempo… y la próxima reunión convocada es para el ¡5 de noviembre! Después incluso de la reunión requerida por la inspección para el 30 de octubre. Parece mentira que desaprovechemos esta oportunidad. El Comité Intercentros de Salud Laboral debería llevar a la inspección un protocolo consensuado y apoyado por todo el servicio de prevención. Entonces sí podríamos garantizar que de ahí saldría un protocolo de actuación. Hasta ahora parecía que todos, al menos los sindicatos, estábamos concienciados. No entendemos como se pueden salir una vez más –unos y otros- por la tangente. CGT-RTVA no esperará el “momento procesal oportuno”, póngase por caso las elecciones sindicales o la negociación colectiva y seguirá presionando ante la autoridad laboral. |
